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Toma forma la esperada “Ley de startups”

Ley de 'startups'

Lo que viene siendo una reivindicación del sector empresarial innovador en nuestro país, está a punto de convertirse en una realidad. Te contamos las principales novedades del Anteproyecto de Ley de fomento del ecosistema de las empresas emergentes y la visión de Alejandro Fresneda, co-fundador y co-CEO de la compañía YABA, una de las startup con mayor proyección en el país tras convertirse en la primera compañía agregadora de marcas nativas digitales en el sur de Europa, que venden exclusivamente a través de Amazon.

El CEO ha calificado esta nueva ley como “un punto de partida en una legislación que era necesaria desde hace ya algunos años”, cuyo objetivo principal es agilizar la creación de nuevas empresas de base tecnológica en España.

¿Qué medidas trae la Ley de ‘startups’?

Empezando por una reducción del tipo del Impuesto de Sociedades (IS) del 25 % al 15 % hasta un máximo de cuatro años para estas empresas emergentes, las medidas incluyen también la subida en la base máxima de deducción de 60.000 a 100.000 euros anuales, o la mejora en la tributación de las conocidas como ‘stock options’ (derechos sobre acciones o participaciones sociales para empleados).

En este sentido, Alejandro Fresneda valora esta última medida que tiene que ver con la captación o retención del talento “como forma de retribución a los empleados”, así como la disminución del tipo sobre el impuesto de la renta.

“La reducción del impuesto de sociedades o el aplazamiento de deudas son medidas que pueden resultar interesantes” señala el CEO de YABA, aunque advierte de que solamente se aplican si las ganancias de la compañía son positivas. Un hecho que “lamentablemente no es muy común”, sobre todo cuando una startup acaba de empezar.

Por otro lado, con el fin de favorecer la instalación en España de los llamados 'nómadas digitales', se ha creado un nuevo tipo de visado específico para estos trabajadores que incluye ahora el ámbito audiovisual. Además, se crea un régimen tributario específico para no-residentes, relajando sus requisitos.

Para Fresneda, una ayuda que resultaría muy interesante si se aprobara, sería la reducción del pago de una parte de la seguridad social a cargo de la empresa, al tratarse según explica de “una partida que consume mucha caja de las startups y que ayudaría a muchas a alargar su runway (meses de caja)”.

Agilización de trámites y mejoras para extranjeros

Una de las ideas más claras de esta nueva regulación es la de flexibilizar las actividades que las startups tienen que llevar a cabo con la Administración a lo largo de su ciclo de vida, sobre todo al inicio, debido a la cantidad de trámites que conlleva el desarrollo de una empresa innovadora de reciente creación.

Con este objetivo, se va a eliminar la obligación de efectuar pagos fraccionados del impuesto de sociedades y del impuesto sobre la renta de no residentes en los 2 años posteriores a aquel en el que la base imponible sea positiva. Además, la nueva ley incluye la no obligatoriedad de obtener el número de identificación de extranjeros para los inversores no residentes.

Por otro lado, teniendo en cuenta que el fracaso de una empresa emergente puede ser tratado como un ‘hecho normal’, la nueva normativa agilizará los trámites para el cese de actividad, que se cumplimentarán por vía electrónica.

Fresneda apunta, no obstante que “aún queda mucho recorrido” para establecer un marco regulatorio adecuado para esta tipología de empresas, pero admite que “sin duda, es un paso importante en el que se debe seguir avanzando”.

“Aunque valoramos positivamente que se comience a actuar en este sentido, creemos que sigue habiendo algunas lagunas importantes que esperamos se vayan corrigiendo en poco tiempo” aboga el CEO.

Datos para la esperanza

Las cifras obtenidas por el Observatorio de Startups de la Fundación Innovación Bankinter, en su estudio de todo el ejercicio anterior, señalan un repunte de la actividad del 36%. Así, en 2020 ha habido un total de 336 operaciones por importe de 1.105 millones de euros.

En lo que se refiere a este año, las startups españolas han recibido un gran espaldarazo en materia de financiación. Así lo confirma el Observatorio, que señala que en el primer trimestre de 2021 se han realizado operaciones por valor de 1.080 millones de euros, un importe que casi iguala al volumen total invertido en el pasado año, debido a la pandemia.

El anteproyecto de ley de ‘startups’, ahora en tramitación parlamentaria, busca también favorecer la colaboración entre pymes, grandes compañías y empresas emergentes, impulsar la inversión en I+D y fomentar la colaboración de las empresas emergentes con las universidades y centros de investigación que puedan reactivar la economía en todos los ámbitos.