El mercado pujante que desea operar con criptoactivos de forma legal en Europa, va a tener que esperar. Al menos hasta 2024, fecha en la que el Consejo Europeo prevé hacer efectiva la entrada en vigor del texto que regule esta materia.
Lo cierto es que el último borrador del reglamento MiCA (siglas de markets in crypto-assets) dilata la aplicación para la mayor parte de las criptodivisas, entre ellas, el bitcoin y el resto de las monedas digitales. Esto hace que aún no este nada clara su supervisión, pese a la urgencia que los financieros españoles empiezan a sentir sobre la materia.
¿Temor a la super inversión en criptomonedas?
Mucho hemos hablado del tema pero lo que esta claro es que sin una regulación que aplique la normativa sobre los criptoactivos, la alta volatilidad y el componente especulativo de esta economía digital solo va a ir en aumento.
Tras la alerta en las autoridades que ha llevado al Banco de España y la CNMV a advertir públicamente a los ahorradores del riesgo de invertir en criptomonedas debido a su fácil creación, entre otras cosas, la espectacular revalorización que esta teniendo este componente es un hecho.
Y es que el bitcoin ha pasado de pagarse a 800 dólares a finales de 2016 a marcar un récord con cerca de los 68.000 dólares el pasado mes de noviembre. Un porcentaje que se ha disparado en cinco años en un 8.500%.
En nuestro país, el temor de esta industria es quedarse atrás, viendo como otros países de nuestro entorno como Alemania, Francia, Portugal o Luxemburgo ya están actuando para contar con un marco regulatorio en el que desarrollarse.
Planes y plazos del reglamento europeo
De momento, se sabe que el proyecto de reglamento europeo prevé un procedimiento simplificado para reconocer a los proveedores autorizados según la normativa propia de los distintos países.
Esto quiere decir que se fomenta la promulgación de una regulación nacional. Un paso para asegurar la gran pregunta sobre su fiabilidad. Así, los proveedores de criptoactivos que cuenten con una autorización nacional podrán seguir prestando los servicios incluso después de la entrada en vigor de MiCA.
La última versión del borrador de esta normativa ha modificado las fechas iniciales que preveían 18 meses para su aplicación desde septiembre de 2020. Por un lado, adelanta seis meses la utilización de la norma para las divisas virtuales ligadas a activos (stablecoins) y para los criptoactivos referenciados al valor de una moneda de curso legal.
Por el otro, se retrasa hasta los 24 meses la aplicación de la regulación a todo el resto de actividades, incluidos el bitcoin y otras criptomonedas, desde que el documento esté definitivamente aprobado.
Se prevé, pues, que el texto reciba la conformidad de las distintas instituciones en este primer semestre, lo que dilata su aplicación efectiva dos años después. En el mes de mayo o junio de 2024, como fecha en la que se publique en el Diario Oficial de la Unión Europea.
