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¿Por qué Finlandia es el país más digital de la UE?

Diagnóstico digitalización de Pymes

La transformación digital es uno de los actuales retos, junto con la transición ecológica, de las economías y las empresas. Una aceleración de la digitalización que si se establece de forma generalizada supondría para España un incremento continuado del potencial crecimiento del PIB.  

Los países nórdicos (especialmente Finlandia, Suecia y Dinamarca) junto a Países Bajos, son desde hace años líderes de la Unión Europea en el ámbito digital en los últimos años, con algunas variaciones en las primeras posiciones.

Nos preguntamos, desde estos modelos, ¿cómo abordar la cuestión de la digitalización en las empresas españolas?. A esta y otras preguntas responde el informe de la Fundación Alternativas que establece un diagnóstico preciso y actual de la situación, recursos y propuestas de digitalización para las Pymes de nuestro país. 

Claves del éxito finlandés en digitalización   

Según el último Índice de Economía y Sociedad Digital (Digital Economy and Society Index –DESI), Finlandia es el actual líder digital de la UE. Ocupa el primer puesto del ranking de los 28 países miembros (por el 16 de España) y, además, tiene posiciones de liderazgo en todas sus dimensiones (capital humano, uso de servicios de internet, integración de tecnologías digitales, y servicios públicos digitales). 

La excepción se produce en conectividad, en la que ocupa el noveno puesto. Aún con todo, se puede percibir que la clave del éxito digital en Finlandia radica en gran medida en el desarrollo de políticas sostenibles que apuestan por una planificación a largo plazo, coordinada y consensuada, integral y transversal; en contraposición a la inmediatez y la improvisación. 

En este sentido, el país ha apostado por el establecimiento de un marco de actuación adecuado para desarrollar e impulsar la digitalización de manera sostenida, incidiendo especialmente en la formación en competencias tecnológicas de toda su población, sin excepción por rango de fecha o laboral. 

Así, se garantiza una de las bases fundamentales del desarrollo tecnológico sostenido de una región, la existencia de una mano de obra muy cualificada, una dotación de recursos productivos adecuada para el pleno desarrollo de su Sociedad de la Información. En definitiva, una planificación a largo plazo coherente con las expectativas de futuro y que contribuyen como elemento diferencial a asegurar su éxito en el tiempo. 

Digitalización = Eficiencia 

Es un hecho que las compañías más digitalizadas son más productivas, sostenibles, internacionalizadas y competitivas. Una serie de consecuencias lógicas a la que se une el dinamismo para la creación de empleo dentro de un nuevo horizonte que posibilita este tipo de innovación. 

Si bien los niveles de conectividad y equipamiento son altos, el tejido productivo español aún presenta margen de mejora. Por ejemplo, en cuestiones relacionadas con la integración tecnológica de mayor complejidad, lo que ocurre especialmente entre las pymes y microempresas. 

Ayudas como el Kit Digital que tanto están funcionando en estas compañías se unen al objetivo del componente 13 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que recoge las inversiones y reformas para el impulso a las pymes, alineados también con la implementación de la Agenda España Digital 2025. 

Y es que nuestro país sigue progresando en su transición digital, registrando un incremento paulatino en los últimos años, acelerado por la pandemia que tanto ha demando la necesidad de conectividad global. 

En 2019, España ocupaba el puesto 11 entre los veintiocho estados miembros de la Unión Europea en el DESI, cuatro posiciones por encima de la media de la UE. 

Así, el citado informe proporciona un diagnóstico tanto de la situación actual de las pymes españolas en materia de digitalización, como de las políticas emprendidas para impulsar el proceso cuyo objetivo es contribuir a la eficiencia, eficacia y rapidez de la transformación digital del tejido empresarial español. 

En el resumen de los resultados podemos destacar los siguientes puntos: 

  • En el contexto europeo, nuestro país destaca en dos de los cinco pilares del DESI: Conectividad y Servicios públicos digitales (segundo puesto). Por el contrario, España se sitúa por debajo de la media de la UE en los indicadores de Capital humano y muy cerca del promedio en Integración de las tecnologías digitales en las empresas.  
  • Entre las micropymes (menos de 10 trabajadores), los indicadores de uso de las TIC y del comercio electrónico son aún menores que entre las empresas de más de 10 empleados. De manera generalizada, los resultados evidencian una importante brecha entre las compañías más pequeñas y el resto.  
  • Las compañías, sin importar su tamaño, coinciden en la relevancia de las nuevas tecnologías para su futuro próximo. En este sentido, entre las microempresas, el 61% invirtió en digitalización en los dos últimos años y entre las compañías de 10 a 100 empleados la cifra llegó al 82%. Por su parte, todas las de más de 100 trabajadores (95%) han destinado fondos a la digitalización.  
  • Entre las barreras más señaladas, que dificultan la digitalización, destacan aquellas relacionadas con la normativa (incertidumbre y obstáculo), la escasez de recursos financieros y los elevados costes de implantación, la falta de habilidades/formación tecnológica y la resistencia al cambio.