La subida del salario mínimo interprofesional supone un empujón más hacia el avance de los sueldos medios en nuestro país, a los que aún les queda camino por recorrer. Sobre todo, si atendemos al compromiso del Gobierno, que ha fijado como objetivo para el final de la legislatura (2023) que el SMI alcance el 60% del sueldo medio estatal, en línea con lo que reivindica la Carta Social Europea.
Con la subida del salario mínimo a 1.000 euros mensuales a 14 pagas, la media estatal aún se encuentra a medio camino del compromiso del Ejecutivo central. En concreto y según datos de las últimas Bases de Cotización de la Seguridad Social (septiembre de 2021), el sueldo medio en nuestro país es de 1.922 euros brutos mensuales.
El SMI de 1.000 euros supondrá un 52% del salario medio
Tomando estas cifras como referencia, el SMI pactado para aprobarse en el próximo Consejo de Ministros sólo superará el 60% de la comunidad autónoma de Extremadura. Un panorama cambiante si el salario mínimo continúa ascendiendo hasta los 1.049 euros que estimó el comité de expertos para finales de año.
Con este panorama, nos encontraríamos por provincias, a unas dos docenas superando el umbral del 60%, siempre y cuando se cumplan las alzas del SMI en 2023. Un salario mínimo de 1.049 euros que equivaldría al 66% del sueldo medio de Badajoz, como la provincia donde el sueldo medio es más bajo (1.602 euros brutos mensuales).
No obstante, si atendemos a las cifras por CCAA, sólo seis regiones cumplirían con este porcentaje en 2023. Cómo es de prever, las comunidades al sur de nuestro país son dónde más se nota este tipo de incrementos.
Por el contrario, el impacto relativo será menor en territorios con bases de cotización medias más altas, como es el caso del País Vasco, donde un SMI de 1.049 euros apenas supondrá el 45% de los salarios medios.
El SMI sube un 40% desde 2019
La subida del salario mínimo en los últimos cuatro años del Gobierno de Coalición aspira a cerrar la legislatura muy lejos de los 735 euros en los que se situaba el SMI en 2019. El primer Ejecutivo del PSOE impulsó entonces una inédita alza hasta el momento del 22,3% hasta los 900 euros como primer paso de la actual senda de subidas.
Hasta el aumento que está a punto de hacerse efectivo, le siguió otro de 50 euros en enero de 2020, marcado por el acuerdo del Ministerio de Trabajo con la patronal y los sindicatos. Con el impacto de la pandemia, la siguiente subida se demoró hasta el pasado mes de septiembre, cuando alcanzó los 965 euros.
Con la cuarta subida del SMI de esta legislatura, sólo queda esperar si se concreta una quinta antes de fin de año. Eso sí, el objetivo de superar el 60% del sueldo medio estatal tendrá que esperar al año que viene.
