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Inteligencia Artificial en las empresas: ¿una realidad?

Inteligencia Artificial en las empresas

Los beneficios que aporta la Inteligencia Artificial (IA) están fuera de duda si pensamos en la relación directa que esta tecnología ofrece con las continuas innovaciones desarrolladas en el mismo campo, como pueden ser la realidad aumentada o el Internet de las cosas (IoT).

Con una presencia aún testimonial, la IA se va a abriendo paso poco a poco en el mundo empresarial. Su presencia se extenderá progresivamente en los próximos años hasta liderar la inversión tecnológica de las compañías más fuertes y su implantación cobrará cada vez más importancia.

¿Qué implica tener IA en las empresas?

Aunque nos lo parezca, la aplicación de IA en las empresas no es nuevo. Las distintas escalas que este sector tiene que cumplir para su implantación definitiva delimita la aparición de unos procesos más o menos rentables.

La base de la tecnología inteligente la encontramos en la automatización del trabajo en las fábricas. La implementación actual pasa por enseñar a esas máquinas a solucionar problemas y a tomar decisiones de la forma más autónoma posible de acuerdo con algoritmos genéticos y redes neuronales que sean capaces de ofrecer un razonamiento lógico.

La prueba más evidente de lo que está ocurriendo es la reciente publicación por parte de la Comisión Europea, de su propuesta de regulación de la Inteligencia Artificial (IA) en todo el territorio europeo de cara a prohibir "sistemas de identificación biométrica remota en espacios públicos".

Con esta ley se pretende concienciar y estableces límites a la par, sobre hasta que punto podemos ser controlados por la identificación remota de la que se nutre esta tecnología. La propia definición de IA nos lo dice, ya que se puede entender como “la capacidad de las máquinas para realizar tareas que suelen necesitar la implicación de la inteligencia humana”.

El impacto social de la IA en las empresas

El desarrollo de esta tecnología es evidentemente más complejo que el que se puede llevar a cabo cuando fabricamos una maquina encargada de actuar en una cadena de producción al uso. Es por ello, que las aplicaciones que tengan que ver con IA serán también más específicas para las distintas industrias.

Aunque aún no existe una estrategia decidida y generalizada para su puesta en marcha en la mayoría de las empresas, se puede apreciar poco a poco cómo será la empresa del futuro y cómo afectarán las nuevas tecnologías inteligentes al desempeño de sus trabajadores:

  • Aumento de la productividad – El rendimiento de los trabajadores la capacidad productiva de las empresas serán los principales beneficiarios de la implantación de la IA. Si las máquinas pueden encargarse de procesos más rutinarios, el empleado podrá aprovechar mejor su tiempo.
  • Mejora de la estrategia empresarial – A priori, las labores más relacionadas en este ámbito son las del intercambio de información y el análisis de datos desestructurados. En menor medida, serán útiles también las relacionadas con destrezas manuales o en la resolución de problemas en tiempo real.
  • Mejor calidad de vida de los trabajadores - La robotización de la industria permitirá a las personas desarrollar capacidades menos mecánicas, lo que a largo plazo supondrá que factores como la creatividad, la intuición o la valoración personal tengan más importancia.
  • Mejor conocimiento de los clientes – Los programas informáticos inteligentes servirán para dar una mejor respuesta automatizadas a las demandas de los clientes. No como hasta ahora estamos acostumbrados cuando hablamos con una máquina, ya que tratarán de ser útiles para conocernos mejor y para diseñar estrategias de fidelización.
  • Mejor conocimiento de los propios productos – La gran cantidad de datos que propicia la IA y sus distintas aplicaciones están relacionados por el número de productos que se ofrecen. La nueva tecnología permitirá simplificar todos los procesos de control en base a almacenamiento, distribución o catalogación de los diferentes artículos.
  • Influencia en el mercado laboral – Si atendemos al miedo generalizado que presupone que la IA puede aumentar el desempleo es porque aún no somos conscientes de la transformación digital a la que estamos irremediablemente expuestos. Los trabajadores deberán actualizarse porque desaparecerán algunas ocupaciones y surgirán otras. Cambiarán los tipos de empleo, pero no el número de puestos de trabajo.