La reforma concursal cuya realidad es un hecho desde hace unas semanas, introduce los llamados planes de reestructuración, que sustituyen a los acuerdos de refinanciación. Un instrumento preconcursal dirigido a evitar la insolvencia, o a superarla, que posibilita una actuación en un estadio de dificultades.
Desde el Ministerio de Justicia, se acaba de habilitar un formulario para presentar el plan de reestructuración para pymes. Un trámite electrónico que permitirá a los destinatarios completar de manera rápida y sencilla el contenido del plan, recogido en el artículo 684 de la nueva norma.
Seguridad y ahorro
Como ya explicábamos, las empresas podrán acogerse a los planes de reestructuración en una situación de probabilidad de insolvencia, previa a la insolvencia inminente que se exige para poder recurrir a los actuales instrumentos concursales que existen en el sistema español.
Además de los estados de insolvencia actual e insolvencia inminente, se introduce este estado de “probabilidad de insolvencia” para fomentar las reestructuraciones empresariales con un enfoque preventivo.
Desde Justicia, han señalado que la iniciativa de habilitar este formulario electrónico va a permitir “mejorar la relación con la ciudadanía, incrementar la eficiencia de la Justicia, ahorrar costes de desplazamientos y tiempo y dar totales garantías de seguridad”.
El formulario se ha habilitado a través de la Sede Judicial Electrónica del Ministerio, junto con las directrices prácticas para cumplimentarlo, tal como establece la ley y de acuerdo con esa finalidad de permitir a las empresas su potencial recuperación.
Requisitos
Este modelo se va a poder aplicar a las personas físicas o jurídicas que lleven a cabo una actividad empresarial o profesional, que hayan tenido un número medio de empleados durante el ejercicio anterior no superior a 49, y cuyo volumen de negocio anual o balance general anual no supere los 10 millones de euros y no entren dentro del concepto de micropyme recogido en la norma.
Con este objetivo, el formulario se habilitado en castellano, en las lenguas cooficiales y en inglés, junto con las directrices prácticas para cumplimentarlo, tal como establece la ley y de acuerdo con la finalidad de permitir a las empresas su potencial recuperación.
Esta iniciativa forma parte de la hoja de ruta del Ministerio de Justicia para poner a disposición de la ciudadanía soluciones tecnológicas que agilicen la tramitación y simplifiquen la publicidad y la liquidación de activos en materia concursal. A su vez, responde también al Plan de Digitalización propuesto por el Gobierno y su estrategia hasta 2025.
