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El comercio afronta el Black Friday más incierto que se recuerda

Black Friday 2022

Una nueva campaña de descuentos en el terreno comercial acaba de aterrizar. Con el año llegando a sus últimas semanas, las empresas se afanan por intentar convencer a golpe de gangas a sus clientes de que son la mejor opción para cubrir sus necesidades. 

Nadie se salva del Black Friday, convertido ya en un acontecimiento sin el que no se entienden las rebajas en medio mundo. El caso es que, después de que el año pasado la falta de suministros marcara toda la campaña comercial en Europa, el apogeo de la guerra en Ucrania y la incertidumbre económica que ha provocado no parece que vayan a hacer de 2021, una excepción. 

Perfiles más demandados en este Black Friday 

La campaña que empezó celebrándose el último fin de semana del mes de noviembre como un alto reclamo para las marcas más incipientes, se ha extendido ya prácticamente a todo el mes, con ofertas por doquier desde hace semanas.

El preludio de las compras navideñas está este año condicionado por el contexto inflacionista y los malos augurios económicos. Por ello, la logística no deja de ser uno de los pilares de nuestra economía, un intermediario necesario para que cada producto llegue a su destino.  

En este contexto, posiciones como 'supply chain', operaciones y compras se vuelven cada vez más imprescindibles y buscadas, debido en parte a la coyuntura global, relacionada con el ecommerce por el auge de las compras online. Mucho tiene que ver también, la proximidad del Cyber Monday.

La búsqueda de nuevos proveedores es constante, con el objetivo de garantizar un buen suministro que evite los retrasos o faltas de entrega del pasado. De hecho, muchas compañías han ido reforzando esta estructura creando nuevos sistemas de compras a través de verticales de materias primas. 

Según datos de la Guía del Mercado Laboral 2022 de Hays España, los profesionales relacionados con el ecommerce aumentaron el 16% a inicios de año, una tendencia que sigue con fuerza marcando el destino de estos perfiles estratégicos. 

Aspectos como la internalización de profesionales vinculados con el comercio electrónico han ayudado a impulsar esta tendencia. Es por ello que, los eventos de alto consumo como el Black Friday en noviembre y la Navidad en diciembre producen muchas incorporaciones de estos perfiles. 

Principalmente de almacén y de operaciones, que tienen que dar salida rápida a gran demanda de suministros, tal y como indica indica la compañía de RRHH. La clave de esta campaña va a ser comprobar si, como otros años corresponden a una contratación temporal o más estable después de enero. 

El papel clave del pequeño comercio 

Si el mayor periodo de consumo del año se aglutina en apenas mes y medio, el pequeño comercio está destinado a apostarlo todo al éxito de estas campañas. Este año, más que nunca, para intentar invertir su balanza e impulsar las ventas

Se espera pues, que los descuentos sean más agresivos después de que los costes se hayan disparado y los consumidores estén más pendientes de una oportunidad aprovechable. Por ello este año, como es cada vez más habitual, gran parte del pequeño comercio ha ido adelantando sus ofertas desde principios de mes.

Al final, el objetivo es prever donde va a estar fijada la atención del consumidor, cada vez más activo en sus búsquedas y reacio al derroche. 

 

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