Estaba prácticamente hecho y ahora sólo falta que entre en vigor. El Consejo de Ministros ha dado luz verde al proyecto que va a reformar la Ley Consursal para mejorar la insolvencia de las empresas, que podrán disfrutar de la exoneración de sus deudas favoreciendo la segunda oportunidad.
La reforma de esta normativa busca facilitar, entre otras cosas, la reestructuración de empresas viables así como mejorar esos procesos de insolvencia, ampliando incluso hasta los consumidores la posibilidad de exonerar esas deudas.
Segunda oportunidad para deudores de buena fe
Ya lo anunciaba la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, en un reciente acto con los empresarios jóvenes de nuestro país, en el que también aprovechaba para valorar la aprobación del proyecto de la conocida como Ley de Startups.
Según destacaba, se trata de un proyecto potente, con el que el Gobierno espera que los proyectos emprendedores “puedan reflotar tras una mala racha”. Así, se contempla esa segunda oportunidad, también para consumidores que sean deudores de buena fe.
Además, esta reforma también incluye la transposición de la directiva europea de reestructuración e insolvencia e introduce otras reformas en el ámbito concursal. La modificación es una de las reformas que se han incluido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Se dirige, sobre todo, a garantizar que empresas y empresarios viables que tengan dificultades financieras, puedan tener acceso a un procedimiento efectivo de reestructuración preventiva con la que puedan continuar su actividad.
Procedimientos de liquidación para microempresas
En este sentido, uno de los puntos que más podría interesar a las pymes, especialmente las microempresas, es esta reestructuración preventiva en fases previas a los procedimientos de liquidación. Así, se presta atención a las empresas más pequeñas, ya que tendrán un procedimiento específico adaptado a sus necesidades.
No obstante, el objetivo a cumplir es que las empresas sigan siendo viables antes de que se vean abocadas a recurrir a este último trámite. Por ello, se ha impulsado en la nueva normativa un marco más flexible y ágil desde el punto de vista procedimental.
Ahora, todo pasa por la aprobación de la reforma lo antes posible. Los visos del Gobierno pasan porque la Ley Concursal pueda entrar en vigor durante el primer semestre de 2022. Aún con todo, la vicepresidenta primera ha manifestado la intención de que se pueda prorrogar la moratoria concursal hasta que la Ley no esté en orden.
Actualmente, la moratoria está prorrogada hasta el 30 de junio de 2022. Y eso que la ministra de Economía ha detallado que la ampliación daría seguridad jurídica durante el plazo transitorio hasta la entrada en vigor de la reforma concursal. Seguiremos pendientes.
