Apenas ha comenzado el año y ya las previsiones económicas tienden a marcar la hoja de ruta de pequeños y medianos negocios que se enfrentan a otro ejercicio complicado.
Según el Barómetro elaborado antes de fin de año por el Consejo General de Gestores Administrativos, el 30% de los pequeños y medianos negocios preveían terminar 2021 con pérdidas. Hablamos con su presidente, Fernando Jesús Santiago Ollero, del presente y el futuro a corto plazo que se presenta para estas empresas.
¿Cuál es el margen de recuperación de las pymes españolas?
En este barómetro se recoge, entre otros datos, que muchas empresas no han podido recuperar su nivel prepandemia de actividad y más de 700.000 atraviesan serios problemas de liquidez.
Santiago Ollero, no obstante, se muestra optimista y precavido a partes iguales ya que confía en que las Pymes, “como han hecho otras veces, serán capaces de salir adelante”, un hecho que no se consigue sin “un gran esfuerzo” por parte de pequeñas empresas “que viven al día y que han puesto todos sus recursos al servicio de sus negocios”.
Para ello, el presidente del Consejo de Gestores recuerda que es necesario “tener empatía” con estos negocios. “Los gobernantes y los agentes sociales deben entender que no es lo mismo lo que le ocurre a una pequeña que a una gran empresa”, resumido en unas ayudas directas y de ICO a las que les resultan mucho más complicado acceder.
“Se debe primero entender la problemática del pequeño y mediano negocio y luego tomar medidas que les sean de aplicación y que puedan asumir sin dificultades”, expone; y es que, si como el barómetro indica, los pequeños empresarios no confían en los Fondos Europeos Next Generation, “estamos a tiempo de corregir esta situación y facilitar el canal a la Pyme y a los autónomos”.
¿Por qué no están funcionando las ayudas a las Pymes?
En lo que se refiere el Plan de Recuperación, volviendo a las ayudas directas, Fernando Santiago critica que se estén exigiendo requisitos a las Pymes más propios de grandes empresas.
Medidas como no incrementar el salario de los directivos o que no estén en paraísos fiscales, no son objetivas cuando se trata de pequeñas empresas. “¿Alguien ha entendido que en 2020 los dueños de los negocios se quitaron el sueldo que cobraban para no cerrar la empresa? ¿Y si solicitan ayudas o ampliar plazos del ICO no pueden ya cobrar en dos años? ¿Alguien ha pensado en eso?”.
Para el presidente de los Gestores, la negativa a estas preguntas tiene un denominador común, y este es el desconocimiento. “No saben lo que les ocurre a los pequeños negocios, y si a eso le sumamos la gran cantidad de requisitos cuando necesitan las ayudas precisamente para hacer esos pagos, entenderemos que fracasen las ayudas directass, incluyendo las de los Fondos Europeos”.
No es de extrañar, por tanto, que se contemplen los fondos de la UE para pequeñas empresas de forma tan negativa por parte de sus principales beneficiarios. Sobre todo, después de que 80.000 personas sigan con problemas en los cobros de los ERTE, según datos del mismo informe.
Además, un 17% de las pymes han tenido durante este ejercicio alguna inspección por parte del Estado, fiscal o laboral. De ellas, el 23% han sido sancionadas como consecuencia de la inspección.
Finalmente, el 34% de los pequeños y medianos empresarios han reconocido que continúan con problemas psicológicos derivados de la pandemia, lo que supone casi la mitad de los afectados en la primera ola de la pandemia. Como decimos, se espera un año complicado.
