Pasar al contenido principal

Impulso a la internacionalización de las empresas

Internacionalización de empresas

El reciente anuncio por parte del Gobierno de fomentar la internacionalización de las empresas con una nueva línea de ayudas viene en un momento en el que las pymes comienzan a mirar al extranjero, en parte gracias a las ventajas que el mundo interconectado está proporcionando en la actualidad.

Hoy en día, muchas compañías deciden implementar una serie de estrategias y políticas orientadas a mercados exteriores. Sobre todo, una vez desechada la idea de que abrirse a la internacionalización supone un coste añadido que exige la apertura de nuevas filiales, la adaptación a los productos o gastos en publicidad.

50 millones de euros hasta 2023

La creación de esta nueva línea de financiación que acaba de aprobar el Consejo de Ministros proviene del Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. En total, se trata de un importe de 50 millones de euros para el periodo 2021-2023.

Una vez superada la peor fase de la pandemia, el Plan de Recuperación prevé medidas de refuerzo de las capacidades e instrumentos de apoyo a la exportación, internacionalización e inversión exterior. Entre estos programas, se encuentra esta Línea de financiación no reembolsable para estudios de viabilidad y modernización sectorial e institucional con cargo al FIEM.

En concreto, desde el Ministerio de Industria se indica que el objetivo de esta línea es ofrecer financiación ligada a estudios de viabilidad, asistencias técnicas, planes sectoriales, consultorías, ingenierías, y cualquier otro estudio que permita la detección, definición y mejora de proyectos de interés para la internacionalización de las empresas españolas.

Prioritarios los estudios en países de África y Asia

Los beneficiarios de esta línea son principalmente los agentes públicos y, excepcionalmente, podrán ser beneficiarias entidades privadas, cuando esté debidamente justificada la necesidad de conceder esta ayuda. El Gobierno ha marcado como prioritarios los estudios ejecutados en países de África y Asia.

Precisamente, el Ministerio de Exteriores presentaba en el mes de marzo Foco África 2023, el tercer plan de acción de la legislatura con proyección exterior de España hacia este continente, donde se muestra el compromiso de impulsar el comercio y la presencia empresarial, así como la inversión española.

La financiación que tiene que ver con estos estudios de viabilidad, asistencias técnicas y consultorías facilita la exportación de bienes y servicios de elevado valor añadido. Esto es porque el arrastre exportador es inmediato para la propia empresa de consultoría que ejecuta el contrato.

Otros efectos indirectos consisten en la posibilidad de ejecutar nuevos contratos, o la adjudicación del proyecto derivado del estudio financiado. Por otra parte, la financiación de estos estudios es un mecanismo que permite detectar y descubrir proyectos, que su vez son oportunidades para otras empresas españolas que podrían llegar a ejecutarlos.

La internacionalización, mucho más que exportar

El reto de la internacionalización en nuestras empresas va mucho más allá de exportar. Se trata de asentarse en otra zona geográfica, pero no de una manera puntual, sino permanente. Es un concepto que gana cada vez más protagonismo entre las pymes debido a las ventajas que proporciona la digitalización que ha impulsado la pandemia.

Por supuesto, la exportación no deja de ser una palanca muy potente, sobre todo en el momento actual. Aún con las dificultades que pueden generar en pequeñas empresas, las ventajas suelen ser mayores, gracias a un sistema que ayuda a generar ventas, a construir nuevas relaciones y a diversificar.

Al final, la internacionalización de empresas consiste en utilizar los recursos disponibles de manera estratégica para aprovechar las diferentes oportunidades que se están ofreciendo en otros mercados, en los que España procura asentarse con lo mejor que tiene.