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Claves del Impuesto de Solidaridad

Impuesto de Solidaridad

Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 incluyen en su proyecto avanzado por el Gobierno de coalición, un paquete de medidas tributarias que prometen una reforma fiscal que va a repercutir directamente en empresas, asalariados y autónomos. 

Desde el endurecimiento de la tributación de Sociedades, la subida del gravamen de las rentas de capital o crear un nuevo impuesto para las grandes fortunas. En este último es donde nos detenemos, por el momento, para responder a las preguntas claves de su próxima regulación. 

Un nuevo tributo sobre la riqueza 

Lo cierto es que desde el Ministerio de Hacienda ya lleva tiempo coleando el asunto, defendido a capa y espada como un gravamen temporal que afectará a los contribuyentes con una riqueza neta superior a los tres millones de euros.  

No obstante, el objetivo del Gobierno es evitar que este nuevo tributo suponga un efecto contagio en la eliminación del Impuesto sobre el Patrimonio, como ya ha ocurrido en Madrid o Andalucía. 

El llamado 'Impuesto de Solidaridad' a las grandes fortunas supone eso sí, la medida más novedosa de esta reforma fiscal, que tiene el objetivo de impulsar una suerte de armonización fiscal autonómica pues permitirá deducir íntegramente su pago, limitando el impacto de eliminar el del Patrimonio. 

Aunque nacía como un tributo temporal para los ejercicios 2023 y 2024, el Ministerio de Hacienda ha adelantado a este mismo año la entrada en vigor de una norma, que incluirá una cláusula de revisión que abrirá la puerta a prorrogarlo a partir de ahí. Pero, para tener clara su tributación debemos hacernos las siguientes preguntas: 

¿Qué se considera una gran fortuna? 

Redundando en la misma cuestión, el Gobierno considera grandes fortunas aquellas que excedan de los tres millones de euros. Una cifra que contrasta con el reglamento del Impuesto del Patrimonio que, por norma general, es aplicable a aquellas fortunas superiores a 700.000 euros, descontando hasta 300.000 del valor de la vivienda habitual. 

¿Qué elementos del patrimonio se gravan? 

Cuando decimos que los dos impuestos van de la mano, no es casualidad. Y es que la base imponible del nuevo tributo será idéntica a la del Impuesto de Patrimonio, que grava las posesiones del contribuyente. 

Este incluye bienes inmuebles, acciones o participaciones empresariales, seguros de vida, bienes y derechos de actividades económicas, rentas permanentes o temporales, artículos de lujo, coches, embarcaciones, aeronaves o antigüedades y obras de arte, entre otros elementos. 

¿Cuánto se tributará por el nuevo impuesto? 

La norma aplicará diferentes tipos sobre tres tramos de patrimonio:  

  • las fortunas de entre 3 y 5 millones tributarán al 1,7%;  
  • las de entre 5 y 10 millones, pagarán un 2,1%; 
  • y aquellas que superen los 10 millones, pagarán un 3,5%. 

Destacable y a tener en cuenta, es que no hay que pagar el impuesto por los 3 primeros millones de patrimonio ya que las cuantías situadas por debajo del tramo inicial operan como una suerte de mínimo exento. 

¿Qué ocurre si el contribuyente ya tributa por Patrimonio? 

Se trata de una de las dudas más recurrentes que suscita el Impuesto de Solidaridad. En este caso, el pago del Impuesto de Patrimonio será totalmente deducible en el nuevo tributo lo que significa que quienes residen en aquellas comunidades que no hayan eliminado el Impuesto de Patrimonio, no tendrán que hacer ningún abono adicional en la mayoría de los casos. 

En caso contrario, y cuando los contribuyentes residan en las CCAA que han modificado a la baja el impuesto tradicional, el impacto del nuevo tributo puede ser especialmente notable pues se gravaría proporcionalmente a la cuantía que se haya deducido. (En el caso de Madrid y Andalucía, donde más se aplicaría) 

¿Cuántas personas se verán afectadas y que recaudación se espera? 

Hacienda estima que el nuevo tributo lo abonarán los 23.000 contribuyentes más acaudalados del país, el 0,1% del total. La cifra es muy inferior a la de los 219.000 declarantes de Patrimonio porque el corte es desde tres millones en lugar de uno. 

En cuanto a la recaudación prevista con el Impuesto de solidaridad, el Gobierno ha estimado más de 1.500millones al año durante sus dos ejercicios en vigor. Una cifra, no obstante, calculada con la premisa de que el Impuesto de Patrimonio no existiese en todo el país.  

Sin embargo, hasta ahora y con los datos actuales de las CCAA, las grandes fortunas fuera de Madrid y Andalucía se ahorrarán pagarlo al deducirse la contribución que ya realizan recurrentemente, y que en conjunto asciende a unos 1.200 millones anuales.  

¿Cuándo entrará en vigor el nuevo impuesto? 

Como decimos, el nuevo tributo estará en vigor durante los años 2022 y 2023 para que la recaudación tenga efectos en 2023 y 2024, coincidiendo con la liquidación de dicho impuesto. Tras estos dos años, el Gobierno evaluará si lo mantiene o no.

La intención del Ministerio de Hacienda es poder aprobarlo antes de final de año y una de las opciones que baraja es introducirlo como enmienda a la proposición de ley que tramita en estos momentos el Congreso para gravar los ingresos extraordinarios a energéticas y entidades financieras.